Autor: Sheryll Poe
14 de mayo de 2020

Un proyecto de techado exitoso no termina cuando se clava el último clavo y se hayan guardado todas las herramientas. El trabajo habrá terminado cuando se haya realizado una inspección final del sitio y el cliente esté satisfecho. Pero, ¿cómo es terminar un proyecto de techado en la era de la COVID-19?

Para mantener el distanciamiento social y minimizar el contacto directo con el cliente, los contratistas de techado deben desarrollar un proceso de inspección sin contacto.

Inspección final del sitio

En lugar de hacer un recorrido juntos, el vicepresidente de Ventas Comerciales de Beacon, John Tierney, recomienda que un tasador recorra el sitio, tome fotografías de los detalles y las condiciones del proyecto y, luego, elabore un informe para compartir con el cliente.

Después de eso, el tasador llamará al representante del fabricante para que inspeccione el trabajo y poder comenzar el proceso de garantía. “Si hay algún problema con el trabajo en el techo, el inspector proporciona una lista de pendientes que se deben reparar antes de emitir la garantía”, explica Tierney. “Después de que se hayan realizado todas las reparaciones, se emite la garantía y se envía al contratista para que pueda prepararse para la inspección final del proyecto con el cliente”.

A lo largo del proceso de inspección, querrá minimizar el contacto directo entre el tasador y el inspector, mantener seis pies de distanciamiento social durante toda la inspección y usar equipos de protección, incluidos guantes y mascarillas.

Comunicaciones finales

Una vez que el contratista haya recibido la garantía del fabricante, es momento de obtener la aprobación final del proyecto del cliente. Con suerte, usted ya habrá configurado un sistema de software basado en la nube en el que el cliente pueda revisar sus informes, incluidas las imágenes del antes y después.

Tierney sugiere hacer una llamada de verificación por teléfono o videoconferencia después de recibir la garantía para “revisar que se hayan completado todos los puntos del contrato, asegurarse de que el cliente esté conforme con los resultados, revisar la lista de pendientes de la inspección final y comunicar que se emitió la garantía sobre el proyecto”.

Si todo se ve bien, el cliente puede dar su aprobación final del proyecto de forma electrónica. “Pueden firmar y fechar de forma electrónica para indicar que revisaron todo el trabajo y que están de acuerdo con que se completó según lo detallado en el contrato original de forma satisfactoria”, dice Tierney, como lo haría el cliente en persona.

Mantener esa conversación final garantizará que todas las partes están satisfechas y permitirá al contratista recalcar la calidad del trabajo realizado para generar buena disposición para futuros trabajos y recomendaciones. “También puede acelerar los cobros y pagos”, dice Tierney. “Una vez que hayan recibido la garantía, realizado esa llamada de verificación y firmado la aprobación final del proyecto, será mucho fácil completar el proceso de pago”, expresa.

Operar en la nueva normalidad

Aunque operar un negocio de techado durante la pandemia de COVID-19 puede ser un desafío, también puede brindar oportunidades para una comunicación más fuerte y más abierta entre contratistas y clientes. Gracias a la tecnología, como elaboración de presupuestos “sin contacto” con Beacon 3D+, pedidos de materiales remotos y seguimiento remoto con Beacon Pro+, videoconferencia, software de firma electrónica y programas de intercambio de archivos, los contratistas de techado pueden llevar a cabo su negocio con éxito tanto durante como después de la pandemia de COVID-19.