Techos de metal en invierno: consejos de diseño para climas fríos

Tendencias de la industria del techado

Autor: Michael Russo | 13 de febrero de 2023

Los sistemas de techos de metal tienen un buen rendimiento en entornos invernales severos, siempre y cuando tengan el diseño correcto. Por lo general, los factores clave incluyen una pendiente adecuada y un diseño estructural apropiado. Instalar un retardador de vapor de calidad o una capa base para techo también puede ser fundamental, según la especificación.

Techo con juntas de plegado saliente con una pendiente pronunciada sobre un edificio cubierto de nieve.
En invierno, los techos de metal casi siempre tienen el rendimiento esperado si en la etapa de diseño se consideran la pendiente adecuada y el uso de retardadores de vapor.

Si se abordan estos inconvenientes durante la etapa de diseño, un techo de metal en invierno casi siempre tendrá el rendimiento esperado. Sin embargo, puede haber ocasiones en las que un contratista de techado comience a trabajar en un proyecto una vez finalizado el diseño; o bien, quizás lo contraten para realizar reparaciones en un techo de metal existente que no fue diseñado para soportar condiciones climáticas adversas. Afortunadamente, hay varias maneras de renovar un techo problemático para que resista la nieve y el hielo.

¿Qué pendiente es suficiente?

Algunos proveedores de techos de metal de plegado saliente aún pueden aprobar una pendiente mínima de un cuarto de pulgada por pie como muestra de la integridad de impermeabilización de sus sistemas. Pero incluso en climas relativamente templados, este tipo de especificación de pendiente leve es, en el mejor de los casos, riesgoso, incluso cuando se usa una capa base para techo excepcional. Los techos prácticamente planos pueden tener goteras y desmoronarse ante una caída de nieve intensa.

Entonces, ¿cómo puede un contratista de techado agregar pendiente a un techo de metal con goteras?

Una solución que ha funcionado para muchos profesionales del techado es un sistema de estructura para reacondicionamiento. Estos sistemas de metal sobre metal añaden un nuevo techo de metal por encima del existente sin molestar a los inquilinos ni interrumpir las operaciones de construcción.

Los sistemas de estructura para reacondicionamiento también pueden tener otros beneficios, por ejemplo, los siguientes:

● Carga de viento mejorada.

● Menos espacio entre correas.

● Aislamiento adicional para una eficiencia energética superior.

Otra opción implica instalar un techo de membrana de una sola capa como poliolefina termoplástica (TPO) sobre un sistema de aislamiento (formado por aislamiento de poliisocianurato) por encima y de poliestireno expandido (EPS) entre las ranuras.

Resolver problemas de condensación

Donde haya una presencia significativa de humedad (más del 30 % de humedad relativa) dentro de un edificio con un clima frío o incluso fresco, puede producirse condensación debajo de un techo de metal. El uso de un simple retardador de vapor como un exterior de aislamiento de fibra de vidrio puede limitar este fenómeno, pero las uniones no pueden superponerse ni enrollarse y engramparse.

Todos los tipos de retardadores de vapor deben sellarse herméticamente en su totalidad. Para lograrlo, las juntas y las penetraciones deben sellarse donde se unen el piso y la pared, y en las intersecciones del techo y las paredes.

Dado que lograr un sellado hermético puede resultar difícil, los paneles aislados de espuma son una buena opción en climas fríos para edificios con una humedad interior alta, como piscinas, centros de impresión y plantas de residuos.

También hay disponibles cintas sensibles a la presión que pueden sellar las juntas de un retardador de vapor; sin embargo, la cinta no se adhiere a superficies húmedas o con polvo. Además, la cinta debe presionarse para proporcionar un sello duradero. Si se instala correctamente, una cinta de calidad puede durar durante toda la vida del edificio, según la revista Construction Magazine.

Carga de nieve en un techo de metal en invierno

La caída de nieve en el norte de Nueva Inglaterra puede ser de hasta 8 pies anuales. Sin embargo, no es necesario que haya 8 pies de nieve sobre un techo de metal para causar problemas. Cantidades menores han mantenido a los ingenieros consultores ocupados y han causado grandes preocupaciones a los propietarios de edificios.

En un techo de plegado saliente con juntas laterales, la formación de hielo despareja puede causar la rotura de las canaletas e incluso del acero calibre 29. Una solución es instalar dispositivos de bloqueo de nieve de ambos lados de las juntas para evitar que la formación de “glaciares” de hielo dañe las uniones.

Los sistemas de techos de metal también pueden hacer que caiga la nieve acumulada a medida que sube la temperatura, lo cual puede representar un riesgo para la seguridad de cualquier persona que se encuentre en el suelo debajo del techo. Instalar paranieves o barreras para hielo puede ayudar a evitar que caigan grandes cantidades de nieve y causen lesiones o daños.

En estos casos, cuando un techo tiene una gotera u otras necesidades de mantenimiento significativas, el contratista de techado suele ser la primera persona a quien se culpa, aunque haya instalado un sistema que diseñó otra persona. Hacer una investigación minuciosa y sugerir soluciones de reacondicionamiento probadas (y buscar un diseñador profesional especializado si es necesario) puede ayudar a mantener su reputación y los techos de sus clientes seguros todo el invierno.

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