Identificación de los daños causados por vientos en el techo y las tejas
Con frecuencia, los vientos fuertes son una causa de daños a las viviendas y las propiedades en muchas zonas de los EE. UU., ya sea por una tormenta, un derecho o un tornado. En 2019, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica recopiló más de 16,000 informes de daños causados por vientos en los EE. UU.
Pero el daño causado por el viento no siempre es evidente. Estos son algunos signos clave para ayudar a identificar los daños causados por vientos en los techos y las tejas de su vivienda.
¿Por qué el techo?
En lo que respecta a daños por vientos, las partes más vulnerables de un techo son el borde que sobresale y las partes que ya están sueltas, como las tejas viejas o las canaletas que cuelgan.
Ha de saber que pueden comenzar a producirse daños leves en los techos cuando los vientos alcanzan las 45 millas por hora, lo que supone un riesgo mayor para las tejas que ya están sueltas. Una vez que los vientos alcanzan las 58 mph, hasta las tejas en buenas condiciones son susceptibles a los daños por la velocidad del viento, ramas de árboles rotas y caída de escombros.
Además de la velocidad del viento, otros factores influyen en el riesgo de daños causados por vientos en los techos y las tejas:
- el tipo y la antigüedad de los materiales de los techos.
- La geometría del edificio y la forma del techo.
- La presencia de escombros que caen.
- La calidad de la instalación del techo.
- La altura y la orientación de otros edificios.
Identificación de los daños
Después de una tormenta, inspeccione el techo para detectar los siguientes signos de daños:
- Tejas rotas o faltantes.
- Con frecuencia, las tejas dobladas por los bordes se encuentran en los puntos de tensión del techo, como los extremos, las esquinas, cerca de la chimenea y la cumbrera. Cuando las tejas se doblan por los bordes, ya no pueden impedir que el agua se filtre por el techo. Sin embargo, las tejas curvas son más difíciles de detectar que las tejas faltantes.
- Tejas levantadas, que también son difíciles de identificar, ya que desde el suelo parecen estar intactas. Cuando los clavos se aflojan y una teja puede aletear o levantarse, el sellador entre cada capa de teja podría estar roto.
- Tapajuntas de chimeneas faltantes o divididos, que es otro punto de tensión cuando hay vientos fuertes.
Nunca inspeccione el techo durante una tormenta o si los rayos continuos o la caída de escombros hacen que no sea seguro estar afuera. Haga la inspección desde el suelo si puede. Si no puede, implemente buenas prácticas de seguridad a la hora de usar escaleras, por ejemplo, usar solo escaleras sobre una superficie seca y nivelada y con otra persona cerca. Nunca camine sobre un techo que pueda estar húmedo o tener tejas sueltas.
Otra señal de advertencia importante del daño por vientos en el techo y las tejas es el daño por agua en el interior de su vivienda. Además de las goteras evidentes en el cielorraso, una fuga puede aparecer como una mancha por agua de color marrón, amarillo o gris, pintura descascarada en las paredes o en el cielorraso, o vigas húmedas en el ático.
Cuándo llamar a un contratista
Incluso los daños menores en las tejas deberían ser motivo para que un contratista de techado inspeccione su vivienda en detalle. Según lo que encuentre, puede que le proporcione un cálculo estimado de las reparaciones. Tenga en cuenta que sus empresas de techado locales podrían estar ocupadas después de una tormenta fuerte, y es posible que tenga que esperar las reparaciones si su situación no constituye una emergencia de techado o una inquietud de seguridad.
Es importante reparar todo daño causado por el viento en el techo lo antes posible. Generalmente, ahorrará en costos de reparación (y dolores de cabeza) al abordar los inconvenientes de techado pequeños antes de que se hagan más graves.