Autora: Barbara Horwitz-Bennett | 12 de diciembre de 2023

Si bien a veces se descuida en el mantenimiento rutinario del techo, la chimenea está tan expuesta como el resto del techo y es igualmente vulnerable al deterioro y las fugas de agua. Diagnosticar y reparar un techo con filtraciones alrededor de la chimenea puede ser difícil. Sin embargo, con algo de orientación, los propietarios de viviendas pueden investigar posibles señales de advertencia y puntos problemáticos, y determinar si hace falta consultar a un contratista de techado.

Comience dentro de la vivienda

Para empezar, los propietarios de viviendas deben inspeccionar en busca de filtraciones en el interior, alrededor de la zona del cielorraso donde la chimenea ingresa a la casa en el ático y en cualquier habitación con hogar. Busque manchas, yeso hundido, vigas enmohecidas y demás signos de humedad, como tejas derruidas.

Si encuentra evidencia de daños por humedad, es hora de encontrar la causa de las filtraciones en el techo alrededor de la chimenea. Hay varias posibilidades: tapajuntas dañados, grietas en los ladrillos y el mortero o un sombrerete de chimenea roto.

El culpable suelen ser los tapajuntas, que son las uniones de metal a lo largo de los valles de la habitación y alrededor de la chimenea. Con el tiempo, o durante una tormenta intensa, los tapajuntas pueden perder su impermeabilidad y deben reemplazarse. Un contratista solucionará el problema quitando el metal viejo e instalando tapajuntas nuevos.

La expansión y contracción de los ladrillos y el mortero a medida que el clima fluctúa de cálido a frío puede provocar grietas. De manera similar, el mortero y la mampostería alrededor del sombrerete de una chimenea pueden agrietarse con el tiempo. Es probable que los dos problemas justifiquen que llame a un albañil profesional o a un contratista de reparación de chimeneas. A falta de un reemplazo integral de la chimenea, puede localizar el área de la filtración y rejuntar el mortero o sellar las grietas.

Una manera de ayudar a protegerse contra las filtraciones es añadiendo una cubierta para la chimenea. Además de una mayor protección contra el agua, la cubierta puede proteger la chimenea de la caída de restos de plantas y la intrusión de animales.

Otras causas de filtraciones

¿Qué sucede si no hay problemas visibles en su chimenea, pero aún encuentra manchas y zonas húmedas? Puede haber un problema con el material del techo encima de la chimenea o adyacente a ella. Una baldosa o teja rota, canaletas obstruidas o frágiles, una capa base deteriorada o espacios entre el revestimiento del tubo de humos y la chimenea también pueden causar filtraciones.

La condensación de una caldera puede ser otra causa inesperada de problemas en las chimeneas. Con una caldera más nueva y de bajo consumo, se conserva más calor dentro de la vivienda y la pequeña cantidad de aire caliente que sale se enfría rápidamente al ingresar al amplio tubo de humos de la chimenea. La humedad que se acumula en esta salida puede ser extremadamente ácida e incluso corroer el mortero del interior de la chimenea.

La mejor manera de prevenir una chimenea con filtraciones es mantener el techo en buen estado. Limpie las canaletas y los bajantes, compruebe que no haya materiales del techo dañados y llame a su contratista de techado local para realizar inspecciones periódicas. Un profesional de techado con experiencia puede ayudar a garantizar que su chimenea mantenga el calor dentro y el agua fuera.